Yo no como pezqueñines

Cuadernillo modesto con aspiraciones en el que iremos desgranando lo que preocupa a nuestra cabeza pensante. Incluye algunas recetas de cocina fáciles y sabrosas.

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jueves, junio 08, 2006

No radicalicemos

Hace poco me he dado cuenta de un detalle sin importancia, pero que me ha hecho reflexionar: el comportamiento de la ideología de una persona sigue una distribución normal a lo largo de su vida.

Empieza formando sus ideas desde bien pequeño, pero cuando las manifiesta al mundo es en la adolescencia: EL MUNDO ESTÁ CONTRA MI. Los adolescentes son radicales, lo sé porque lo fui.

Luego llega a una edad (adulto joven) donde se da cuenta de que nada es lo que parece yTODO ES RELATIVO. Ahora mismo estoy en ese momento. Nada es verdad ni es mentira, todo depende del color del cristal con que se mira, que dijo un español muy sabio.

Luego tienes hijos y entonces tu único pensamiento es QUIERO QUE CREZCAN, o eso dice la gente que tiene hijos pequeños.

Y llegamos a la edad que me interesa porque es la que me hace reflexionar: a partir de los cincuenta años la gente se vuelve ULTRA-RADICAL. No conozco el motivo, pero es cierto, y si no me creen, observen a sus mayores. ¿Acaso no tengo razón?
Conozco a padres de familia con posición económica muy, muy buena que acuden a las manifestaciones “antihomosexuales” como si su vida dependiera de ello (increíble). Hablan con ardor guerrero de cómo las grandes compañías de este país compran al Gobierno (algo que nadie pone en duda), se ofenden íntimamente por el famoso estatuto de Cataluña y además esperan que la Administración dote con mayor generosidad a los centros de educación públicos pero llevan a sus hijos a los privados porque “así tienen una formación moral”, como si los demás no la tuviéramos, hay que joderse.

Bueno, lo que yo quería decir a esta gente es: relájense, no adelanten la fecha del infarto innecesariamente, la mejor forma de protestar en una democracia es en la urnas electorales, y por último, yo no necesito ir a una universidad privada para saber que una obligación moral es saludar a la gente que limpia mi habitación, entre otras cosas porque yo misma limpio mi habitación (lo sé no tengo clase ni dinero).

Como dice Lisa Simpson: “la forma de manifestar pacíficamente mi oposición a la tele por cable es no verla”.

5 Dígamelo:

Blogger il codino divino said...

lo primero decirte que claro que puedes meter mi blog en tus links...es un orgullo.

lo segundo es que es verdad lo de la edad radical, aunque creo que luego se suaviza o se desradicalizan. Mira, en mi departamento trabajo con dos hombres de entre 45 y 50 años y son....radicales y de derechas...a mi me tienen frito, pero he aprendido a no escuchar!!!

3:39 p. m.  
Blogger LaReinadelosMares said...

Gracias, en cuanto reorganice mi plantilla te incluyo como link.

3:56 p. m.  
Blogger Octavio said...

Buenas, y enoharbuena por el blog de obligada visita para todos los personajes marinos...

1:17 p. m.  
Blogger Brithuss said...

Mi estimado, casi anciano y jubilado padre se reune con sus amiguetes para tomar algo o para pasear casi a diario y verles hablar de fútbol, política, el tiempo o lo que sea es un espectáculo digno de unas palomitas y un refresco. Se ponen como mulas de cabezotas, a dar voces y a negar la mayor. Debe ser eso del envejecimiento de la neurona. Lo peor de todo es que imagino que nos pasará a todos/as

L.B.

4:14 p. m.  
Blogger LaReinadelosMares said...

No lo dude, amigo Lord B., tengo una teoría sobre gente mayor y los cambios trascendentales que ocurren en esas edades, de la que ya les hablaré.
Hay gente que piensa que es terriblemente inhumano eso de envejecer, yo creo que no hay nada más natural, pero tengo 27 años, y mis pocas arrugas no me hacen una experta en el tema.

4:22 p. m.  

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